Al registrarse un incendio en el cerro “El Chato” en la sierra del municipio de Huimanguillo, el titular del Instituto de Protección Civil (IPECT), Mauro Winzig Negrín dio a conocer que Tabasco no cuenta con el equipo para sofocar incendios vía aérea, por lo que se está solicitando el apoyando del Ejército Mexicano y la Marina.
El incendio forestal empezó a salirse de control alrededor de las 19 horas del martes, poniendo en riesgo la reserva “Parque Agua-Selva”, que tiene un aproximado de mil 500 hectáreas, amenazando con extenderse el cerro “La Pava” y un total de 8 comunidades entre las que destacan los ejidos: Chimalapa 1ra, Chimalapa 2da sección, Francisco J. Mújica, Carlos A. Madrazo, Villa Guadalupe, la colonia las Flores y Ejido Malpasito.
Ante este incalculable siniestro, Mauro Winzig, precisó que apoyados por el Ejercito Mexicanos y La Secretaria de Marina se realizaría un sobrevuelo en la zona para determinar la magnitud del incendio, debido a que por su ubicación, es complicado llegar vía terrestre.
Entrevista vía telefónica con Angel Antonio Jiménez, el funcionario detalló que en coordinación con protección civil municipal y estatal Región Sabana, se realizaron guardarrayas en un perímetro de 500 metros con 4 metros de ancho para evitar que el siniestro alcance la reserva ecológica del cerro de la Pava y las 8 comunidades en mención.
En coordinación con la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR), dijo que se analiza las medidas a tomar para que, apoyados con elementos del Ejército y la Marina, puedan sofocar el incendio vía aérea.
Sobre las casusas del siniestro, Winzig Negrín dijo que hay muchas vertientes, sin embargo, la que ha determinado las autoridades es la quema “controlada que labriegos del lugar pretendieron hacer, pero que se vieron rebasadas por los fuertes vientos y las guardarrayas resultaron insuficientes.
Después del sobrevuelo que se hagan en la zona, señaló que se va a determinar si se determina evacuar las comunidades que podrían resultar afectadas por el incendio del cerro “El Chato”.
Por: Liliana Calcáneo