Al no existir por parte de la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) una advertencia sobre los riesgos del Tramadol, un medicamento derivado de los opioides, en México no se considera un riesgo para la salud pese a que en países africanos hay alertas de adicción.
La regulación internacional en Tramadol no nos obliga. No es prudente fiscalizarlo internacionalmente porque tiene un efecto terapéutico valioso», aseguró el director ejecutivo de regulación de estupefacientes psicotrópicos y sustancias químicas de la Cofepris, Alberto Miguel Guzmán, en entrevista para Excélsior.
El encargado del área de psicotrópicos y sustancias químicas de la Cofepris aceptó que el consumo de este medicamento puede generar farmacodependencia, y se tiene registro en África de casos de adicción, sin embargo, no se ha hallado otras referencias en los países integrantes de la UNODC.
En algunos países puede generar un problema, en países, pareciera que africanos, está generando algunos problemas, pero que no es el caso de otros países como el nuestro», dijo.
El especialista aseguró que el efecto del Tromadol no es potente en comparación con el fentanilo y la morfina, por lo que la regulación y restricción no puede ser la misma.
Independientemente de que son opioides, el tratamiento, en cuanto su regulación, no puede ser la misma porque los riesgos que estos conlleva, en cuanto potencia de estos medicamentos, es diferente», aseguró.